La Catedral de Nuestra Señora de la Inmaculada Concepción fue consagrada en 1649, aunque se inició a construir desde 1575.
Tiene cinco naves de un modelo arquitectónico muy elevado y su planta fue diseñada por el arquitecto Francisco de Becerra.
En su nave principal se encuentra el Coro, el Altar Mayor (con el Ciprés de Manuel Tolsa) y el Altar de los Reyes; además de las numerosas capillas, la Sacristía, el Ochavo (dónde se guardan las reliquias y los tesoros de la Catedral), la Sala de Gobelinos y finalmente existe un espacio que guarda su gran archivo histórico del cabildo catedralicio y su gran archivo musical con partituras especiales para tocarse en este recinto.
Para el siglo XIX José Manzo incluyó elementos neoclasicos a la Catedral de Puebla; mientras que la última pieza fue el Órgano gigante que llegó en 1974.
Entre las obras de arte de la Catedral de Puebla se encuentran firmados nombres como: Manuel Tolsa, Luis Lagarto y sus libros del coro, Baltasar de Echave y Luis Berrueco que embellecen la Sacristia, Cristóbal de Villalpando que pintó la cúpula, Pedro Muñoz que hizo la sillería del coro, entre otros.